(Lo que no se vio ni se oyó en la tele)
http://youtube.com/watch?v=cLNeWkRA1MY
Muy querid@s compañer@s de lucha:
En el zócalo y en todo México soplan aires de Victoria para nuestro Movimiento… El Grito, el auténtico, el de los Libres, se oyó claro, se oyó fuerte, se oyó lejos… La tele intentó silenciarlo, pero es imposible silenciar la verdad y la dignidad… No nos llevemos a engaños, ni nos desanimemos, ni mucho menos nos dividamos por la inmoralidad de nuestros adversarios, ni por sus trampas e hipocresías… La tele que ardientemente defendió hace unos días la "libertad de expresión" (sabemos bien que en realidad defendían sus intereses económicos y de poder) mostró esta vez, nuevamente, su verdadero rostro, pretendiendo silenciar el Grito de los Libres y poniendo en sus pantallas una versión de la realidad, mutilada y absurda, para que quien no es todavía libre pueda, si quiere, seguirse auto-engañando…
Ese es el punto que no debemos olvidar: "El pueblo que quiere ser libre, lo será" (Juárez y Obrador)… Y, como contraparte, quien no quiere ser libre, quien gusta del atole con el dedo, quien es esclavo de intereses y privilegios y por ello abandona principios y valores humanos básicos, no podrá ser libre y rechazará y pretenderá no oír, molesto y avergonzado, el Grito de los que sí son libres…
¿Qué grito escuchaste tú anoche, compañer@, hayas estado en el zócalo o no? ¿Qué grito gritaste tú desde lo más profundo de tu corazón? ¿El grito de los esclavos o el Grito de los Libres? ¿Qué grito decides seguir gritando: el del abandono y la rendición, el de las quejas y amarguras, o el Grito de la Esperanza, el Grito de Victoria, el Grito de la Libertad?
Hoy, en México, el Día-Grito de Independencia ha de gritarse-lucharse-conquistarse cada día y a cada segundo… No perdamos la voz. No bajemos los brazos. Sigamos combatiendo y resistiendo, decididos y esperanzados…
Álvaro, ciudadano de la IV República
Ese es el punto que no debemos olvidar: "El pueblo que quiere ser libre, lo será" (Juárez y Obrador)… Y, como contraparte, quien no quiere ser libre, quien gusta del atole con el dedo, quien es esclavo de intereses y privilegios y por ello abandona principios y valores humanos básicos, no podrá ser libre y rechazará y pretenderá no oír, molesto y avergonzado, el Grito de los que sí son libres…
¿Qué grito escuchaste tú anoche, compañer@, hayas estado en el zócalo o no? ¿Qué grito gritaste tú desde lo más profundo de tu corazón? ¿El grito de los esclavos o el Grito de los Libres? ¿Qué grito decides seguir gritando: el del abandono y la rendición, el de las quejas y amarguras, o el Grito de la Esperanza, el Grito de Victoria, el Grito de la Libertad?
Hoy, en México, el Día-Grito de Independencia ha de gritarse-lucharse-conquistarse cada día y a cada segundo… No perdamos la voz. No bajemos los brazos. Sigamos combatiendo y resistiendo, decididos y esperanzados…
Álvaro, ciudadano de la IV República
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