domingo, 05 de noviembre de 2006
POR Ricardo Andrade Jardí
Y ahora que AMLO presentó al gabinete del gobierno legítimo sería de esperar, en una de sus primeras acciones de gobierno, una participación más activa en las demandas ciudadanas demostrando sensibilidad social y sumándose de entrada a la lucha del pueblo oaxaqueño que ha decidido no permitir ni un segundo más la corrupción prianista de la simulación institucionalizada.
En Oaxaca se están gestando las subjetividades de resistencia civil de un nuevo imaginario social que encuentra sus raíces en el hartazgo de la pobreza y la injusticia. En Oaxaca están naciendo, junto con la experiencia de los municipios autónomos de Chiapas, las nuevas formas de gobierno y participación ciudadana que están desterrando pacíficamente el arraigado y decadente sistema de "representación" y corrupción pederasta de casi 80 años de simulación "democrática".
La Convención Nacional Democrática está obligada ha sumarse a las demandas sociales del pueblo que le ha dado la representatividad que tiene, poco hay que esperar de los partidos políticos nacionales y particularmente del PRD, hundido en su afán por refundar a lo que fuera el viejo PRI, el de Echeverría y Díaz Ordaz, baste de ejemplo los gobernadores perredistas ya en negociación con el espurio Fecal.
Pero a López Obrador lo nombró legítimo Presidente una Convención Nacional donde la mayoría delegada nada tiene que ver con los partidos políticos y sí mucho que ver con los hombres y mujeres que el 2 de noviembre detuvieron en Oaxaca los intentos del gobierno federal por entrar en la Ciudad Universitaria y tomar las instalaciones de Radio Universidad (hoy Radio APPO) La voz del pueblo.
Por eso la presencia del nuevo gabinete del gobierno legítimo que tomará posesión el 20 de noviembre se antoja necesaria en Oaxaca para hacer frente a las embestidas federal y local y como un intento para parar la masacre que los prianistas intentan justificar a través de las mentiras de la telecracia. La salida de Ulises Ruiz es inminente, el sujeto ya nada tiene que hacer en el Estado y más bien debería estar ya siendo juzgado por asesino, esa debe ser una tarea inmediata del Gobierno de la nueva República, el juicio político a Ulises Ruiz, Fox y Abascal, al tiempo que se inician las auditorías ciudadanas a cada uno de los funcionarios del foxismo para fincar las responsabilidades correspondientes por el atraso, la pobreza y la farsa en que hoy se encuentra enfrascada nuestra bananera república.
Oaxaca es hoy el espejo de México y no tardaremos en ver surgir nuevas resistencias civiles a lo largo y ancho del país, los mexicanos no tenemos porqué seguir aguantando que nos representen los pederastas y los ladrones de la república simulada, pero estas luchas irán de la mano o no del gobierno legítimo y de la CND, de la sensibilidad que ese gobierno muestre para otorgar y no para detentar el poder dependerá la futura construcción ética de la nueva República y mientras esto sucede la organización ciudadana seguirá impulsando las heroicas formas de resistencia que se están convirtiendo ya en formas de auto organización de gobierno y de participación social más democráticas, sin duda, que la arcaica idea de la representación plurinominal que sólo sirve para otorgarle fuero a los delincuentes más peligrosos y amorales del corrupto e institucional sistema.
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