Oaxaca, Oax. 26 de noviembre de 2006. El sobrevuelo de helicópteros por encima de las casas del centro de la ciudad de Oaxaca, así como patrullajes de la policía local y federal, quienes con clara intención intimidatoria portaban sus armas desenfundadas entre las rodillas, sirvió de marco a una “marcha” encabezada por Ulises Ruiz Ortiz, calificado como “usurpador” por las bases del Movimiento Popular Oaxaqueño y que él mismo adjetivó como “la marcha de la victoria”.
Por las calles del centro, que el día de ayer se convirtieron en un campo de batalla, se podían observar convoyes hasta de 30 camionetas de policías tanto federales como estatales peinando la zona, mientras del aeropuerto salían helicópteros —dos grandes y un pequeño— para detectar desde el aire la posible presencia de activistas.
Los vuelos y los patrullajes intimidatorios se suman al terrorismo de Estado, que ha empleado sus cuerpos policíacos para atacar las barricadas, secuestrar y asesinar activistas y periodistas y que el día de ayer se estrenaron en las redadas masivas contra los participantes en la séptima megamarcha que intentó cercar a la PFP (Policía federal Preventiva), acantonada en el zócalo.
Esta sería la segunda ocasión desde que inició el conflicto en que Ulises Ruiz ingresa a pie al centro histórico. La vez anterior también lo hizo en medio de un “dispositivo de seguridad” impresionante, paseándose por el parque El llano, donde decenas de policías tuvieron que disfrazarse de simpatizantes priistas y de albañiles.
domingo, noviembre 26, 2006
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