Cada mexicano puede hoy elegir entre sentirse representado por un gobernante producto y parte de un sistema que tolera en puestos de gobierno y de representación incluso a los pederastas. O en un Presidente legítimamente investido por millones de ciudadanos en un emotivo acto en el Zócalo de nuestra República.
Que conste, podemos elegir.
Lo que era impensable hasta antes del 2O de noviembre de 2006. Hasta antes día en que, con la cancelación foxista de la celebración de la interrumpida Revolución mexicana, se dio inicio a la continuación pacífica de esa revolución, que lleva visos de poder ser concluida por un movimiento ciudadano que aglutina a los muchos millones de mexicanos, pobres y ricos, amas de casa y profesionistas, estudiantes y curas, ancianos y niños, burócratas y sindicalistas, indígenas, mestizos y criollos, etc., que aspiramos a que México sea algo más que el paraíso de todos los pederastas que hoy habitan en el mundo.
No hay mejor prueba de que todo lo malo que nos acontece en la vida siempre trae aparejada alguna cosa buena, que el hecho de que los mexicanos tengamos que agradecerle a la derecha, al PAN y a Fox, el rescate del águila juarista, que no se habría dado si Fox nohubiera mochado el escudo "que porta en medio gallarda nuestra bandera", cantarían, si en el jardín de niños continuaran, los que seguramente se emocionaban cada lunes al hacer los honores a nuestra enseña patria.
En las escuelas de monjas violatorias de la Constitución que consignaba que toda educación tenía que ser laica, pero tan toleradas como parte de un sistema que desde entonces se corrompía, hasta esas cosas se escatimaban con la doble moral de la derecha que en ellas ya imperaba.
La derecha siempre ha sido igual y los equivocados fuimos los que creímos que se le podía dar un voto de confianza votando por Fox, para sacar al PRI de Los Pinos, que con el PAN regresó con sus representantes más corruptos.
Votamos, que no elegimos, como se nos hizo saber cuando se evidenció que fue comprada la Presidencia con dinero llegado del extranjero, lo que el IFE solapó, como hoy ha declarado electo, al comprado por la telecracia, a sabiendas de que Calderón no va a dejar de ser un gobernante espurio, impuesto por el TRIFE como usurpador.
Calderón eligió ser el gobernante del sistema que mantiene como gobernadores y como legisladores, coordinadores incluso de comisiones políticas, a pederastas o en el mejor de los casos protectores y amigos de pederastas, los que entre ellos se llaman "preciosos" y se mandan "cariños".
Sí, cada mexicano, puede elegir hoy en quién quiere verse representado y eso hemos hecho los millones que sólo reconocemos a AMLO como Presidente Legítimo.
Calderón no va a ser Presidente Constitucional, aunque la telebasura lo repita mil veces al día, como parte de la enajenación que promueve, en los ratos en que de plano no promueve o exhibe pornografía, porque sí, a eso se dedica también la telecracia mexicana.
Vergüenza le debería dar al diario español "El País", antaño el órgano del gobierno socialista, queriendo intervenir en lo que no entiende o peor aún, como esbirro, desesperado que está el gobierno Ibérico en exportar a México a sus empresarios delincuentes que ya no tienen cabida en otro lugar del mundo.
En lugar de perder el tiempo, el gobierno veracruzano, buscando a los asesinos de Cirilo Vázquez Lagunes, los que ya se sabe que no va a encontrar porque es obvio que su muerte se debe, esa sí, a un ajuste de cuentas entre los mismos delincuentes que se ven representados en un gobierno que da cabida a los pederastas, debería estar organizando un homenaje a las muchas víctimas de ese cacique asesino, de triste memoria, que gozaba de toda la impunidad del sistema corrupto que Calderón busca encabezar como el gobernante usurpador que ha decidido, el PRIAN, imponer en México desde el próximo 1 de diciembre.
De horror son los nombramientos que se manejan sobre los que integrarán su "gabinete", acordes al Victoriano Huerta, que ha decido ser el presidente elegido por el IFE y convertido en usurpador por el TRIFE.
Podrá callar la prensa vendida y la telebasura, ídem de lo mismo, los millones que en el Zócalo, con temperaturas mínimas, muy mínimas, estuvieron representando a otros muchos millones que no pudimos ir, en la toma de posesión de AMLO, pero como dijo Jairo Calixto Albarrán, ayer, en Milenio: "Fueron muchos más que dos. ¿Fuiste a esa mamada?, me preguntaron con la elegancia propia del caso algunos que se distinguen por su sentido crítico y olfato periodístico, refiriéndose a la toma de posesión de López Obrador. Pues para ser una mamada, pensé, por lo menos fue tumultuaria. (.) Mexicanos que contra lo que afirman buena cantidad de especialistas, comunicadores y librepensadores que confeccionan sus lucubraciones en la intimidad de su despacho y que no suelen darse baños de pueblo -no les vaya a dar un aigre-, no son esa bola de rebeldes sin causa, hijos de Ahumada y Bejarano, profesionales del resentimiento social y neocomunistas trasnochados que suponen (.) Se los digo nomás para que no se confíen creyéndose todo lo que afirman los agoreros del desastre perredista y al rato no les salgan las cuentas como al IFE y al TEPJF" (.) Menospreciarlos, que es el deporte favorito del momento, sería, ahí sí, una mamada".
Que conste, no lo digo yo, lo dice un articulista de Milenio, diario en el que su director sólo vio, desde la telebasura, claro está: "Consumada la inaudita farsa callejera (.)". Ja.
Que conste, podemos elegir.
Lo que era impensable hasta antes del 2O de noviembre de 2006. Hasta antes día en que, con la cancelación foxista de la celebración de la interrumpida Revolución mexicana, se dio inicio a la continuación pacífica de esa revolución, que lleva visos de poder ser concluida por un movimiento ciudadano que aglutina a los muchos millones de mexicanos, pobres y ricos, amas de casa y profesionistas, estudiantes y curas, ancianos y niños, burócratas y sindicalistas, indígenas, mestizos y criollos, etc., que aspiramos a que México sea algo más que el paraíso de todos los pederastas que hoy habitan en el mundo.
No hay mejor prueba de que todo lo malo que nos acontece en la vida siempre trae aparejada alguna cosa buena, que el hecho de que los mexicanos tengamos que agradecerle a la derecha, al PAN y a Fox, el rescate del águila juarista, que no se habría dado si Fox nohubiera mochado el escudo "que porta en medio gallarda nuestra bandera", cantarían, si en el jardín de niños continuaran, los que seguramente se emocionaban cada lunes al hacer los honores a nuestra enseña patria.
En las escuelas de monjas violatorias de la Constitución que consignaba que toda educación tenía que ser laica, pero tan toleradas como parte de un sistema que desde entonces se corrompía, hasta esas cosas se escatimaban con la doble moral de la derecha que en ellas ya imperaba.
La derecha siempre ha sido igual y los equivocados fuimos los que creímos que se le podía dar un voto de confianza votando por Fox, para sacar al PRI de Los Pinos, que con el PAN regresó con sus representantes más corruptos.
Votamos, que no elegimos, como se nos hizo saber cuando se evidenció que fue comprada la Presidencia con dinero llegado del extranjero, lo que el IFE solapó, como hoy ha declarado electo, al comprado por la telecracia, a sabiendas de que Calderón no va a dejar de ser un gobernante espurio, impuesto por el TRIFE como usurpador.
Calderón eligió ser el gobernante del sistema que mantiene como gobernadores y como legisladores, coordinadores incluso de comisiones políticas, a pederastas o en el mejor de los casos protectores y amigos de pederastas, los que entre ellos se llaman "preciosos" y se mandan "cariños".
Sí, cada mexicano, puede elegir hoy en quién quiere verse representado y eso hemos hecho los millones que sólo reconocemos a AMLO como Presidente Legítimo.
Calderón no va a ser Presidente Constitucional, aunque la telebasura lo repita mil veces al día, como parte de la enajenación que promueve, en los ratos en que de plano no promueve o exhibe pornografía, porque sí, a eso se dedica también la telecracia mexicana.
Vergüenza le debería dar al diario español "El País", antaño el órgano del gobierno socialista, queriendo intervenir en lo que no entiende o peor aún, como esbirro, desesperado que está el gobierno Ibérico en exportar a México a sus empresarios delincuentes que ya no tienen cabida en otro lugar del mundo.
En lugar de perder el tiempo, el gobierno veracruzano, buscando a los asesinos de Cirilo Vázquez Lagunes, los que ya se sabe que no va a encontrar porque es obvio que su muerte se debe, esa sí, a un ajuste de cuentas entre los mismos delincuentes que se ven representados en un gobierno que da cabida a los pederastas, debería estar organizando un homenaje a las muchas víctimas de ese cacique asesino, de triste memoria, que gozaba de toda la impunidad del sistema corrupto que Calderón busca encabezar como el gobernante usurpador que ha decidido, el PRIAN, imponer en México desde el próximo 1 de diciembre.
De horror son los nombramientos que se manejan sobre los que integrarán su "gabinete", acordes al Victoriano Huerta, que ha decido ser el presidente elegido por el IFE y convertido en usurpador por el TRIFE.
Podrá callar la prensa vendida y la telebasura, ídem de lo mismo, los millones que en el Zócalo, con temperaturas mínimas, muy mínimas, estuvieron representando a otros muchos millones que no pudimos ir, en la toma de posesión de AMLO, pero como dijo Jairo Calixto Albarrán, ayer, en Milenio: "Fueron muchos más que dos. ¿Fuiste a esa mamada?, me preguntaron con la elegancia propia del caso algunos que se distinguen por su sentido crítico y olfato periodístico, refiriéndose a la toma de posesión de López Obrador. Pues para ser una mamada, pensé, por lo menos fue tumultuaria. (.) Mexicanos que contra lo que afirman buena cantidad de especialistas, comunicadores y librepensadores que confeccionan sus lucubraciones en la intimidad de su despacho y que no suelen darse baños de pueblo -no les vaya a dar un aigre-, no son esa bola de rebeldes sin causa, hijos de Ahumada y Bejarano, profesionales del resentimiento social y neocomunistas trasnochados que suponen (.) Se los digo nomás para que no se confíen creyéndose todo lo que afirman los agoreros del desastre perredista y al rato no les salgan las cuentas como al IFE y al TEPJF" (.) Menospreciarlos, que es el deporte favorito del momento, sería, ahí sí, una mamada".
Que conste, no lo digo yo, lo dice un articulista de Milenio, diario en el que su director sólo vio, desde la telebasura, claro está: "Consumada la inaudita farsa callejera (.)". Ja.
!!AMLO Presidente Legítimo de los Mexicanos!!
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