El gabinete económico presentado por el espurio demuestra, para los que tengan un mínimo dejo de memoria, que el cuñado del proveedor estelar del IFE no sólo no combatirá las causas de fondo que generan la pobreza sino que, al contrario, se encargará de "justificar" el saqueo de lo que Salinas de Gortari ya no tuvo tiempo de saquear. Es una crónica anunciada. Que nadie se engañe. En tres años a lo mucho tendremos los niveles más deplorables, en todo el país, de pobreza y los ricos, más ricos, del planeta, al tiempo que nuestros recursos, con la venia del PRIAN, serán privatizados por las mismas empresas que antes saquearon y quebraron Argentina. ¿O por qué creen que las editoriales del periódico El País están tan insistentes en justificar la ilegalidad del fraude electoral como virtud de la democracia?
Pero sin duda un punto más a favor de la urgente refundación de la República, son las declaraciones de los legisladores del PRIAN, con relación a la toma de protesta del gobierno legítimo el lunes 20 de noviembre.
"Es intrascendente para nosotros", decían los electos senadores de la derecha, es decir, que la legítima demanda de millones de ciudadanos no sólo no es escuchada por esos sujetos con fuero, no sólo es desoído que el rumbo que han decidido tomar cuando menos el 40% de los electores, con el respaldo de cerca del 60% de ciudadanos que consideran que se debió llevar a cabo el voto por voto como garantía de legitimidad, sino que es un acto intrascendente para los mismos legisladores que han aprobado como coordinador político, a un sujeto ligado públicamente con el amigo empresario del "góber precioso", al amigo de los que valoran la justicia en "dos botellas de coñac".
La refundación de la nueva República parte justamente del ideal de incluir todas las voces, sonantes y disonantes, en un México de todos y para todos y no en un México de unos cuantos, donde la trascendecia histórica del movimiento social pretenda ser ignorada por políticos corruptos y medios informativos inmorales y carentes de la más elemental ética, sin entender que, al igual como lo intentaron hacer entonces con el gobierno itinerante de Benito Juárez, el 20 de noviembre del 2006, de forma pacífica, millones de mexicanos hemos dado los primeros pasos para la transformación urgente de un sistema podrido en las garras de la amoralidad y los excesos de la impunidad y no lo hacemos sólo por nosotros sino por el futuro, hoy en riesgo, de las nuevas generaciones, lo que incluye a sus hijos. Quienes pretenden dar continuidad a ese sistema bajo los falaces argumentos de la defensa de las instituciones de la democracia son los que sacan partido de la corrupción imperante en esas instituciones que no responden ya a la realidad social, la impunidad de las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez y otros Estados así como el FOBAPROA, la profundamente inmoral Ley Televisa y las cabezas cercenadas por kaibiles y sicarios son claros ejemplos que se suman la de los "góber preciosos" y a la de los Ulises Ruiz, de lo que la supuesta democracia nos ha heredado a los mexicanos.
El camino de la IV República, no es la oposición caudillista a los procesos democráticos, sino, al contrario, es la Revelación Auténtica de esos procesos en las manos ciudadanas, la nueva República busca regresar el poder democrático al pueblo, eligiendo en asambleas delegados siempre revocables por la base, para que de manera participativa éste sea el que decida sus rumbos y no la jauría de dinosaurios que se refugian en los abrevaderos de la decadencia institucional y la impunidad del fuero a toda costa.
Intentar desconocer o minimizar el tamaño y la fuerza de este movimiento (civil pacífico) es apostar por el camino de la violencia y esa salida hasta hoy sólo ha sido contemplada por la derecha prianista y su hipócrita doble moral.
Que nadie se equivoque, el movimiento ciudadano más grande de la historia moderna de México se nutre de un claro imaginario: "para todos todo, queremos todo, lo nunca (siempre) nuestro, lo siempre (nunca) ajeno, lo tomaremos".
Pero sin duda un punto más a favor de la urgente refundación de la República, son las declaraciones de los legisladores del PRIAN, con relación a la toma de protesta del gobierno legítimo el lunes 20 de noviembre.
"Es intrascendente para nosotros", decían los electos senadores de la derecha, es decir, que la legítima demanda de millones de ciudadanos no sólo no es escuchada por esos sujetos con fuero, no sólo es desoído que el rumbo que han decidido tomar cuando menos el 40% de los electores, con el respaldo de cerca del 60% de ciudadanos que consideran que se debió llevar a cabo el voto por voto como garantía de legitimidad, sino que es un acto intrascendente para los mismos legisladores que han aprobado como coordinador político, a un sujeto ligado públicamente con el amigo empresario del "góber precioso", al amigo de los que valoran la justicia en "dos botellas de coñac".
La refundación de la nueva República parte justamente del ideal de incluir todas las voces, sonantes y disonantes, en un México de todos y para todos y no en un México de unos cuantos, donde la trascendecia histórica del movimiento social pretenda ser ignorada por políticos corruptos y medios informativos inmorales y carentes de la más elemental ética, sin entender que, al igual como lo intentaron hacer entonces con el gobierno itinerante de Benito Juárez, el 20 de noviembre del 2006, de forma pacífica, millones de mexicanos hemos dado los primeros pasos para la transformación urgente de un sistema podrido en las garras de la amoralidad y los excesos de la impunidad y no lo hacemos sólo por nosotros sino por el futuro, hoy en riesgo, de las nuevas generaciones, lo que incluye a sus hijos. Quienes pretenden dar continuidad a ese sistema bajo los falaces argumentos de la defensa de las instituciones de la democracia son los que sacan partido de la corrupción imperante en esas instituciones que no responden ya a la realidad social, la impunidad de las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez y otros Estados así como el FOBAPROA, la profundamente inmoral Ley Televisa y las cabezas cercenadas por kaibiles y sicarios son claros ejemplos que se suman la de los "góber preciosos" y a la de los Ulises Ruiz, de lo que la supuesta democracia nos ha heredado a los mexicanos.
El camino de la IV República, no es la oposición caudillista a los procesos democráticos, sino, al contrario, es la Revelación Auténtica de esos procesos en las manos ciudadanas, la nueva República busca regresar el poder democrático al pueblo, eligiendo en asambleas delegados siempre revocables por la base, para que de manera participativa éste sea el que decida sus rumbos y no la jauría de dinosaurios que se refugian en los abrevaderos de la decadencia institucional y la impunidad del fuero a toda costa.
Intentar desconocer o minimizar el tamaño y la fuerza de este movimiento (civil pacífico) es apostar por el camino de la violencia y esa salida hasta hoy sólo ha sido contemplada por la derecha prianista y su hipócrita doble moral.
Que nadie se equivoque, el movimiento ciudadano más grande de la historia moderna de México se nutre de un claro imaginario: "para todos todo, queremos todo, lo nunca (siempre) nuestro, lo siempre (nunca) ajeno, lo tomaremos".
!!Tenemos Presidente, AMLO Presidente Legítimo de los Mexicanos!!
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